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lunes, 25 de abril de 2011

Hessel, Sampedro y el futuro

¿Por qué si has nacido después de 1980 tienes que hacer caso al mensaje de un par de señores que han nacido en 1917?

Para empezar porque el simple hecho de que te estén dirigiendo la palabra ya es algo extraordinario. Ya es bastante especial, teniendo en cuenta la esperanza de vida al nacer del año en que nacieron y el siglo que les ha tocado vivir (guerras, hambre, holocaustos, represión, pruebas nucleares...) que estén vivos; y aún más extraordinario, que conserven la lucidez, no sólo por su edad, que también, sino especialmente por no haberse dejado ganar por un sentimiento de frustración al ver como está el mundo, que les hubiese llevado a exiliarse interiormente y a perder todo interés por la especie, a dejarla por imposible hace ya muchos años y a llevarse el aprendizaje de su intensa y dilatada experiencia vital a la tumba.

Segundo, porque te lo cuentan en pocas palabras y muy fáciles de entender, luego no requiere mucho esfuerzo: los logros sociales no los regalan. La igualdad, la justicia, la libertad se conquistan y cada persona ha de tomar partido en esa batalla, porque le va la vida en ello. Sobre todo a los pobres. Y todos, excepto los ricos por su casa, somos pobres. Si vives de tu trabajo, eres pobre. Si no tienes trabajo, eres más pobre aún.

Tercero, porque Hessel y Sampredro no son meros supervivientes, pertenecen a una generación que creía en el progreso, en que otro mundo era posible y que ellos (junto con todos sus coetáneos) tenían la llave del cambio. Eligieron sus causas y actuaron en consecuencia. Y entre todos lograron cosas, cosas muy valiosas como que la gente que nacía pobre y vivía de su trabajo no se muriese en la miseria y que la educación y la atención médica llegara a las masas. Nos advierten también que las conquistas no son para siempre, que hay que trabajar por mantenerlas. Ven que estas conquistas están erosionándose y por eso nos gritan “Indígnate”, “Reacciona”, piden que no se vaya por la borda todo aquello por lo que tantos dieron la vida y que tanto nos beneficia a todos. Nos están pidiendo que tomemos el relevo y por nuestro bien deberíamos tomarlo.

Si no sabes que hacer, lee (de todo) y conversa con otros (real y virtualmente) de lo que te preocupa, elige causa y obra en consecuencia y desconfía del sistema, sobre todo de los medios de comunicación, porque su objetivo es tener a la gente entretenida. Decía Godard el de la Nouvelle Vague que los que explotan no les cuentan cómo lo hacen a los que están explotando y que los media (prensa, tv, cine, arte,...) son el discurso de los explotadores hacia los explotados, por lo tanto no podemos encontrar un reflexión fiable de lo que ocurre en el mundo a través de ellos. Piensa en la información que se te ofrece: noticias con un montón de ruido, publicidad y fútbol, mucho fútbol. Es entretenido, pero mientras, te están comiendo la merienda.

Es probable que estos medios te transmitan el mensaje de que no tienes futuro. Pero es mentira. Piensa en la gente que nació el 1917, vete a una hemeroteca ¿qué futuro crees que tenían? El que ellos construyeron (y de las rentas estamos aún viviendo). Tu punto de partida es mejor, estás mejor alimentado, sabes leer y escribir y estás conectado.

¡Vamos!





martes, 19 de abril de 2011

Lampedusa, Gadafi, Finlandia: problemas complejos, soluciones prácticas.

¿Qué es el fascismo sino la exacerbación del sentido práctico llevado a la política?

Que molestan los judíos, pues los asfixiamos; que nadie se ocupa del hogar si todos trabajan, pues las mujeres a casa; que nos pasamos hereditariamente los genes y eso genera "errores", eliminemos los "errores"; que que todo el mundo opine hace más difícil el orden social, eliminemos la libertad de opinión; que hay grupos sociales que no se ajustan a las normas de un orden social establecido, pues erradiquémoslos. Son soluciones simples a problemas complejos.

Una de mis preguntas de toda la vida es porqué la gente (incluso gente que está intelectualmente dotada para muchas otras cosas) acepta el fascismo con tanta facilidad. Porqué las clases medias se inhiben y dejan que esto pase. Pues porque estas situaciones emergen en el momento de máxima complejidad social, cuando la gente está muy harta de líos, de conflictos, de follones, de no saber qué pensar, de no saber qué hacer... Y entonces viene alguien que dice: "Es muy fácil. Nosotros nos ocupamos, tú lo único que tienes que hacer es ajustarte a un orden social, hacer tu vida y no molestar. Y señalarnos a los que molestan, para quitarlos de en medio y que todo gire. Deja esto en nuestras manos, nosotros nos aseguraremos de seleccionar a los "hombres" más capaces y mas firmes para el gobierno; tú vuelve a tu pequeña vida, trabaja, ten hijos, consume, consume, consume, no te apartes del buen camino y tu vida será una maravilla (sólo los subversivos tienes algo que temer). Si eres lo suficientemente valeroso, algún día podrás incluso acceder a esta élite de capaces, que están ahí por sus méritos, no por ser ricos o estar bien conectados". Es un discurso muy directo para gente harta, desconcertada y con muy buen concepto de sí misma. Por eso triunfa, el ejemplo de Finlandia no es más que otra manifestación de este fenómeno.

Y claro, cuanto más follones parezca que hay, pues mejor, más va a confiar la gente en los gobiernos que propongan soluciones simples.

Y esto da miedo, porque estando el mundo como está tenemos margen para mucho follón, y los simplificadores están a la vuelta de la esquina: que es un gran inconveniente que los inmigrantes de Lampedusa quieran quedarse en el país, pues los enviamos a otro; que ese otro país ve un problema recibirlos, pues se cierran las fronteras; que tenemos dictadores con un lucido historial terrorista pero que tienen la llave de una de las mayores reservas de petróleo, pues tendremos que considerarlos amigos, extravagantes, pero amigos; que esos dictadores están disparando contra su propio pueblo, pues qué le vamos a hacer, pero las fuentes energéticas y el control social de la zona son más importantes; que lo más fácil para hacerse con el control del país es minar sus instituciones y es desacreditarlo hasta tal punto que deba ser intervenido por las instituciones financieras internacionales, pues sea...

Y así andamos. Así que cada vez es más urgente que salgamos de nuestras pequeñas vidas y que busquemos la mejor manera de canalizar nuestra energía con otros que también saben que los problemas complejos sólo se remedian con soluciones complejas.

Busca tu causa y actúa, porque si esperas un poco puede ser tarde.

domingo, 17 de abril de 2011

¿Mujer Salvaje?

Leo Mujeres que corren con los lobos de Clarissa Pinkola Estés, una psicoanalista jungiana, especialista en psicología etnoclínica que dice que para estar sanas tenemos que recuperar a la Mujer Salvaje que llevamos dentro.  La clave para llevar una vida plena está, dice, en conectarnos con la naturaleza femenina fundamental, que según ella se parece mucho a la de los lobos.

Para Pinkola encontrar y unirse a la naturaleza instintiva significa "establecer un territorio, encontrar la propia manada, estar en el propio cuerpo con certeza y orgullo cualesquiera que sean los dones y las limitaciones físicas, hablar y actuar en nombre propio, ser consciente y estar en guardia, echar mano de las innatas facultades femeninas de la intuición y la percepción, recuperar los propios ciclos, descubrir qué lugar le corresponde a una, levantarse con dignidad y conservar la mayor consciencia posible". ¿No está mal verdad?

Para encontrarla dice que hay que hacer arqueología en nuestra propia psique y que esto se puede hacer a través de los cuentos. Pero no a través de los cuentos de hadas que nos han contado a las generaciones más recientes, edulcorados, deshumanizados, mutilados, a los que se les ha sustraído todo el contenido sexual, escatológico, precristiano, sino a partir de las historias orales arquetípicas universales, que se han pasado de generación en generación en muy diversos contextos culturales, comunicando la sabiduría de siglos y siglos de humanidad vivida. La autora analiza una selección de 19 cuentos que pueden ofrecer pistas para encontrar a nuestra Mujer Salvaje.

Apenas he leído un par de cuentos y el lenguaje psicológico y el planteamiento místico de esta mujer no me llegan muy directamente (occidentalizada que está una), no obstante, dice cosas muy curiosas y voy a seguir leyendo, porque ¿y si realmente esa Mujer Salvaje existe? Desde luego, me resulta mucho más atractiva la idea de explorar si tengo una Loba en mi interior que la de buscar a "la niña que llevo dentro".  Entre otras cosas porque siempre me he temido que la mía fuese la niña del exorcista, o lo que es peor, que todo es posible, la niña de Rajoy.

martes, 12 de abril de 2011

Gente que abre puertas

Como mucha otra gente, estoy rodeada de otra gente que se pasa el día intentando abrir puertas que creen que nos llevan a un mundo mejor.
Gente que se esfuerza cada día en hacer las cosas como cree que las tiene que hacer, como creen que es posible hacerlo, de un modo más sensato, más generoso, más transparente. Y que sabe que no todos es cuestión de dinero.
Es gente que cree que puede provocar cambios para mejor vivir, que la transformación no es sólo necesaria, sino también posible. Y que no se desanima porque otros no lo crean.
Son personas que saben que el cambio comienza por uno mismo y que si no se pelea por lo que se quiere, si no se insiste, si no se lucha, ganarán los defensores del insostenible status quo.
Son gente que sabe que sólo se pueden hacer cosas que merezcan la pena con otra gente.
No son gente famosa, ni líderes de grandes movimientos, pero cada uno de ellos tira lo que puede en su propio campo (pequeños y no tan pequeños, desde el activismo social,  la investigación, la empresa, el deporte, el mundo interior... o todo a la vez).
No son angelitos, algunos son soberbios, otros cabezotas, o intransigentes (especialmente con los inmovilistas), todos obstinados y muchas veces se equivocan, como nos equivocamos todos. Pero ahí están, tratando de abrir puertas, arreglando cerraduras, empujándolas cuando están atascadas, tirando con todas sus fuerzas, aunque algunas veces el único problema es que son correderas, o que sólo se abren con códigos o tarjetas especiales.
A esta gente le vendría bien un poco de ayuda y que quienes gobiernan se pusieran, aunque sólo fuera de vez en cuando, a su altura.